La aplicación MyScoop nace con la pretensión de potenciar el periodismo ciudadano. Permite a cualquier persona con un smartphone vender sus fotos y vídeos originales a una audiencia de pago. Todo el contenido generado por el usuario se verifica automáticamente por hora y ubicación e incluye una marca de agua para mantener los derechos de autor de los usuarios.
Es una aplicación que permite a los periodistas ciudadanos y móviles cargar imágenes de interés periodístico y que luego pueden ser adquiridas o compradas libremente por los editores como contenido de colaboración colectiva.
MyScoop, que se lanzó por primera vez en Asia, comenzó a ser tendencia en la tienda Google Play en apenas cuatro semanas. La aplicación, incluida la interfaz de usuario y la experiencia del usuario, fue creada y diseñada por Mohammad Kawwam, un empresario que vive en Londres.
Esta aplicación tiene como objetivo conectar directamente a los creadores de contenido con los compradores de ese contenido, lo que permite informes de medios precisos. Los creadores o scoopers, como se les llama, son principalmente activistas independientes. Son los vloggers, los periodistas ciudadanos o los testigos locales de las historias que suceden a su alrededor. Con la aplicación, ahora tienen la oportunidad de tener una audiencia de pago.
Los compradores, por su parte, son editores que buscan contratar profesionales independientes y comprar grabaciones móviles originales pagando a sus fuentes por su contenido original.
La idea surge por la viralidad que tienen las imágenes periodísticas en las redes, pero que en muchas ocasiones no se puede contrastar ni el autor puede ejercer sus derechos. De ahí que esta nueva app sea calificada por su creador como “el futuro del periodismo”, puesto que trata de proporcionar imágenes verificadas y fiables de la actualidad.
Kawwam asegura que, gracias a esta aplicación, los periodistas que quieran generar contenido podrán hacerlo fácilmente y, además, de manera remunerada. También considera que los medios de comunicación van a rentabilizarla, al poder contar con contenido original, grabado a través de las cámaras móviles de los scoopers desde cualquier lugar del mundo. Por último, el tercer beneficiario sería el propio usuario, que recibirá información debidamente contrastada.